jueves, 31 de diciembre de 2009

para el año que se inicia en las palabras de una grande

Yo me nazco, y misma me levanto,
organizo mi forma y determino
mi cantidad, mi nùmero divino,
mi règimen de paz, mi azar de llanto.

Establezco mi orden y termino
porque sì, para nunca, por lo tanto.
Soy lo que se me ocurre cuando canto.
no tengo ganas de tener destino.

Mi corazòn estoy elaborando;
ordeno sufrimiento a su medida,
educo al odio y al amor lo mando.

Me autorizo a morir sòlo de vida.
Me olvidaràn sin duda pero cuando
mi enterrado capricho lo decida.

DE Asunciòn de la poesìa. MARÌA ELENA WALSH . grandiosa poeta argentina.

a contramano


a veces no alcanza con nuestra propia cordura


el mundo se pone a girar


a contramano


de la lògica


girando en espiral


barranca


abajo


sábado, 12 de diciembre de 2009

HUECA

Hueca
Hueca de carne, de sangre, de alma
Hueca de historias
De planes
Hueca, ardiendo,
Cráter en llamas.

sábado, 5 de diciembre de 2009

dejar las armas?


Qué hacer cuando te sobra el cuerpo
Late el corazón muerto, se siente en la garganta ese latido.
Dos latidos, tres, cuatro, pero son tan ajenos,
Y un pozo hondo en el pecho
La nausea acecha, y el recuerdo, ese tenaz recuerdo que se empeña
en venir sin ser llamado
Late,
Late sin pertenecerme, y no hay manera, sigo viva.

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Hoy será porque no me siento bien que nadie me cuestiona
La niña que fui está hoy callada
Tiene fiebre dicen, tiene tanto cansancio pienso
Y aprovecho.
Y me duelen el pasado, el presente, el futuro
La humanidad toda me duele desde la médula de mis huesos
Y estoy a punto de tirar la toalla, y no quiero que nadie la levante
Basta, pienso, basta de batallas
Cuando será mi tiempo de dejar las armas.
Para Noemí, que me enseño que se puede mejorar el mundo, sin bajar las verderas armas:el disenso respetuoso , la imaginación en el otro, el respeto por las ideas diferentes , y sobre todo la alegría del descubrimiento. gracias por tus eternas palabras de aliento ante cada paso que fui dando, sos un ejemplo para siempre.

martes, 10 de noviembre de 2009

El día en que la luna fue la estrella de Germania


Germania es un pueblo como tantos pueblos agrícolas armados alrededor del ferrocarril en la provincia de buenos aires. Como todo pueblo pequeño tenía algunos pocos acontecimientos memorables en el transcurrir plácido de arena volando, fogatas de cardo ruso en San Juan y San Pedro, comuniones, casamientos y fiestas de fin de año.
Pero no hubo nada que se pareció jamás a ese 20 de julio de 1969 cuando la humanidad entera vió al hombre poner el pie en la arena de la luna. Claro que en Germania tuvo algunos condimentos dignos de ser contados.
Obviamente, en Germania todos escuchaban la radionovela pero no había ni hubo por muchos años televisión en cada casa. Ese día inolvidable algún vecino visionario supo que era un hecho que no podía pasar desapercibido para nadie.
Alguien prestó un televisor que fue entronizado en el club social de Germania que contaba con un salón enorme de pisos de pinotea donde se fueron ubicando las personalidades del pueblo y el resto de los vecinos. Como todo pueblo agrícola , la mayor parte de la población no vivía en el pueblo sino en los campos vecinos.
Nosotros, los chicos, no alcanzábamos a comprender la magnitud del hecho histórico pero entendimos bien que algo importante estaba por suceder cuando al correr del día iban llegando de los campos vecinos cantidades de sulkys, carros y caballos que fueron atados en los palenques de la plaza abarrotando la calle principal del pueblo.
Todos andábamos emocionados, nunca se había visto tanta gente junta en el pueblo. Caminábamos cuchicheando y esperando el gran momento en que la televisión, borrosa y llena de lluvia nos mostrara ese aparente gran suceso que tenía tan entusiasmados a todos los adultos de los alrededores.
Tanta fue la gente que llegó al pueblo que el enorme salón de pinotea se vio colmado de observadores y claro, como en esas épocas los primeros no eran los niños, al ver que no entrabamos todos, sin ningún miramiento, algún importante dirigente del pueblo nos mando sin pena ni gloria a mirar por las ventanas.
Así fue que vimos una figura entre las lluvias de la televisión saltar bastante ridículamente , dejar la pisada para la posteridad , encaramados como pudimos, uno arriba del otro ,colgados de los barrotes, tratando de alcanzar las ventanas altísimas del salón del club social. Finalizado el espectáculo , cada quien se subió a su caballo o sulky y volvieron a sus casas. Alcanzamos a oir al pasar los comentarios.-“ Si va ser que llegaron a la luna…., estos yanquis creen que nos van a hacer creer cualquier cosa con la televisión esa"

ojos de agua


de pequeña eran tus ojos
azabache en la mirada
con dos trenzas renegridas
blanca y redonda tu cara
las mejillas de pimiento
dientes de perlas bordadas

tu espalda se fue encorvando
en cada vuelta de arada
las manos encallecidas
por los leños que quemabas
y tu sonrisa es ahora
marlo de choclo , dorada.

con el tiempo se marcaron trazos hondos en tu cara
cada línea va mostrando los surcos que hizo tu pala
tu piel se hizo color tierra, la misma de tu morada
y se amansaron tus ojos de tanto cuidar tus llamas

tu piel huele a lanolina, a humo, y paja cortada
y ahora tienen tus trenzas líneas de plata enredadas
no hubo sombrero que cubra
tu piel curtida y bonceada.
y para que se te distinga
al caminar las picadas
te vestis de mil colores
poque de tierra es tu cara.

y mientras pasan los años
señora de la baguala
se te llenan las pupilas de celeste madrugada
como si fueran de agüita, será que ya no ves nada?
me pregunto que mirabas
abuela de la quebrada.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

frase a préstamo


Con la edad, es legítimo ser felizmente egoísta.


W.H. Auden.

martes, 27 de octubre de 2009

A mis fantasmas con cariño


Nunca me asustaron los fantasmas, ellos andan por ahí, sin molestar, yo lo sé desde que era chica. Dicen que los niños y los animales los sienten, no así los adultos, yo debo tener algo de animal tal vez, obviamente ya no soy una niña, porque aunque no podría explicarlo con palabras, tengo la certeza que andan rondando mis pasos.
Y digo que no me asusto porque al fin de cuentas son personas como nosotros que vaya a saber porque razón siguen por acá haciendo alguna cosa que les debe haber quedado pendiente.
A mí siempre me gusto pensar que son mis familiares, gente querida que anda cerca por el solo hecho de acompañarme y cuidarme. Y me gustaría aclarar también que para mí ellos son los verdaderos ángeles de la guarda, esos, a los que me hacían rezarles de niña de memoria.
Dudas no tengo, que las tenga cualquiera, no me importa, quizás el que me escuche me crea un poco loca, o mitómana, o vaya a saber.
Yo ya estoy tan acostumbrada a sentir su leve paso , que ya ni me sorprendo ni dejo de hacer lo que estoy haciendo. Ahí andan me digo, como si fuera el perro o el gato de la casa. Creo que debe ser eso lo que les gusta de vivir conmigo, ni me molestan ni yo a ellos. Lo cierto es que conviven conmigo con total libertad de mi parte. Leí por ahí que pueden manifestarse con olores de ese alguien conocido que ya no está, y que nadie me diga que nunca tuvo un sueño tan vivido con alguien querido y perdido que cuando despertó supo, sin dudarlo que eso poco tenía de sueño y que si tenía todo de mensaje.
Mis fantasmas me acompañan con la respuesta justa, el alerta a tiempo y esa sensación indescriptible de no estar sola ni siquiera en los peores momentos. Hay noches en que me despierto abrazada por un sueño, mañanas que recuerdo con tanta claridad una conversación supuestamente soñada y algunos días, pocos para ser sincera, que se huele a pipa entre la enredadera de mi patio, y esos días aprovecho y les pido que no se les ocurra abandonarme a mi suerte.

La hija del encantador de gusanos


Mi papa hacia bailar a los gusanos del durazno, esto no es una metáfora . Por años, en mi infancia encontrar un durazno con gusano era diversión asegurada por un rato. Las mesas familiares del verano eran largas y nosotros, ocho primos de edades en escalera, desde los 10 hasta los dos años , saltábamos de emoción cuando papá decía, _ ojo que éste viene con gusanito…
Los más grandes, entre los que me encontraba yo, mirábamos tratando de descubrir el truco. Pero mi papá tenía una velocidad increíble para mover su dedo índice antes que el gusano se elevara del plato.
Atrás de las “palabras mágicas” arriba gusanito y con un gesto de su dedo el gusano se levantaba vertical, luego él decía seriamente, caminemos, y ahí iba el bicho desplazándose por el plato hasta que nuevamente repetía la orden de arriba y otra vez el gusano hacía la vertical.
Esta prueba circense terminaba cuando mi papa decía _” listo, el gusano tiene que descansar, ahora todos a dormir.” Lo que en idioma adulto era, ya no voy a tener tantas coincidencias y se me va a derrumbar el mito de que este gusano me obedezca una vez más.
Pero allá partíamos nosotros, primos embelesados a la cama convencidos de pertenecer a una familia mágica que contaba nada menos que con un mago encantador de gusanos del durazno.

dios vive en San Mauricio





San Mauricio mide cuatro cuadras alrededor de una plaza. La casa principal, casco de la antigua estancia conserva sus paredes en pie, los pisos de pinotea derrumbados dejando ver los sótanos, los techos con flores pintadas en papel , un patio de baldosas de granito dibujadas , un aljibe de cuento de las mil y una noches y un zaguán de pisos color a gloria y el entramado de un antiguo vitraux inglés que aprovechan las enredaderas para crear una nueva obra de arte.
Al lado de la casa está, también en ruinas, la iglesia del pueblo, con importantes columnas difíciles de abrazar por una sola persona y una puerta de cedro bellísimamente tallada que dice el año de su construcción. Solo habitan la casa y la iglesia miles de palomas caseras y un casal de búhos campanario de blanco inmaculado. Un vaqueano que daba agua a sus vacas en el camino nos contó que habría no más de cinco habitantes en el pueblo.

Pero no comprendí tanta desolación hasta que llegue a la estación de tren y ahí me di cuenta que Dios vivía en la estación de San Mauricio. Y si el mismo Dios vive en la estación, qué necesidad hay de que haya mucha gente viviendo en el pueblo.
El camino a la estación es un típico camino guadaloso de la zona, pero llegando a la estación, una doble fila de enormes eucaliptus hacen techo y sombra al viajero. En la casa de la estación oficialmente no vive nadie, pero sus pisos relucen de cerámica colorada y pinotea intacta. El ala posterior de pisos de ladrillos lustrosos juega con las luces de las chapas y las ventanas dándole una sensación de caleidoscopio al alma.
Notablemente no hay nada tirado ni sucio y aunque no hay muebles ni enseres, para qué los querría Dios de todos modos, el hogar de la sala de espera tiene bien acomodados unos leños para cuando Dios recibe visita.
Las vías de San Mauricio no están solas, a cada lado de ellas, Dios como demostración de su poder, acumulo titánicas parvas de enormes durmientes de quebracho. Frente a las pilas de quebracho están los tres galpones.
Entrar en ellos , solo y en silencio es como levitar, el piso cálido de adoquines de madera da ganas de andar descalzo, el viento chifla musical entre las chapas, y un juego especial de luces que solo Dios puede manejar, iluminan artísticamente los tirantes. Basta pararse al costado de las puertas, dejarse acariciar por el viento, sentir el batir de sus palomas de la paz y sus búhos sabios para comprobar, ya sin ninguna duda, que hace rato que Dios eligió vivir en San Mauricio.

viernes, 23 de octubre de 2009

NIÑITA MADRE


Hay niñita madre
Pariendo en septiembre
Te pesa el futuro
Te pesa tu vientre

Como te consuelo
Madre de septiembre
La tierra se abre
Brota tu simiente

Tu niño tendrá
Soles en el pelo
Perfumes de azares
Calmaran sus sueños

Brisas suavecitas
Mecerán su cuna
Zorzales cantores
en sus mañanitas

No llores más niña
Déjalo que venga
Tu niño es bendito
Naciendo en septiembre.

humanidad somos todos





CUENTOS EN 33 PALABRAS


LA ALFARERA
Ana moldea la arcilla y del horno salen tinajas que viajan por el mundo llevando en su corazón el
amor de Ana.
Ana curó, amasando arcilla, sin saberlo, al conocerla, mi corazón roto.

VIDA
Por las dudas yo estoy afuera, dijo Paula, hermana del secreto que iba a dejar de serlo.
Yo apreté la panza, como pidiéndole ánimo al que venía.
Entré. Mamá, dije, tengo que hablarte

RANQUEL
Denisia, de Victorica, hila, teje y tiñe con papa de monte y jarilla.
Alquila una piecita y trabaja por horas.
Ella que es la dueña de todo… Y no se queja, ríe.

SECUNDINO
Secundino, diente de oro, Bolivia pura, hace la huerta en casa
Y sabiondo me dice, acelga en cuarto creciente, zapallo en menguante.
_” ¿Hoy que luna tenemos? ”_”Ni idea, che. “ Ríe , mostrando su diente

PENITA
Nadie comió su torta, y se encerró en el baño a llorar sola.
La maestra supo que lloraba otra pérdida.
Cuando volvió al aula el plato estaba vacío.
Cada porción regaló una amiga.

TRILI
“Llegó el día vieja”,_ dijo.
Barrió el andén, controló cambios y señales, y se sentó a esperarlo con un amargo.
Puntual , el último pasó levantando polvareda que se pegaba en sus ojos mojados.

jueves, 15 de octubre de 2009

BELLA


Sin ríos, sin verdes
tan plana, tan yerma.
hasta tu árbol ícono parece sacado de entre los muertos.
será que los remolinos en los arenales se llevan mis pensamientos
será que tanta arena tapa lo que más duele
será que tu viento grita que no me detenga
sera que de tan parca,
me das tregua para mis propios pensamientos
pero sobre todo es , unicamente aca, pampa ruda
donde puedo ver
los cuatro horizontes al mismo tiempo.

sábado, 10 de octubre de 2009

septiembre en Susques

Susques es una mancha del color de la tierra ocre de la puna.
Las casas apenas se divisan, el monocromo hace difícil distinguirlas hasta que uno baja por una callecita y entra al poblado. Susques se mueve lento, al paso del escaso oxigeno del aire.
La iglesia de Susques también es ocre, techo de paja añejo, que nunca se vuela ni se moja.
En Susques casi no llueve en todo el año.
Al entrar a la iglesia, acostumbrando las pupilas a la escasa luz de las ventanitas pequeñas se empiezan a descubrir sus colores, afuera todo es monocromo , la tierra, las casas , la gente.
Dentro de la iglesia una explosión de colores fuertes, impresionistas, llenan de felicidad el alma.
Son dibujos bellos, sencillos, como hechos por niños, saltan los rojos, verdes, dorados, azules.
Toda la iglesia grita acá estamos, somos felices, coloridos, plenos.
Cuida la iglesia una pastora de riguroso sombrero negro, pollera florida, y arrugas de sobra para sus escasos años.
Me cuenta la historia de la iglesia pero a mí me angustia la sequía perpetua y le digo como en un rapto de optimismo:_” estarán esperando la lluvia, no?”
_No, me dice, acá llueve solo en verano para que la tierra este verde en el próximo invierno así hay pasto para los cabritos.
Si llueve en septiembre, decimos acá, malparió la lluvia.

HAY DIAS QUE PASA POR MI PUERTA UNA CARAVANA DE DIFUNTOS


Son esos los días de las grandes preguntas
Son esos los días de las no respuestas
y mientras van pasando,
me abrazan mis muertos amorosamente
Y yo simplemente entre lágrimas
Decido dejar de hacer preguntas.



(a alber que camina conmigo)

jueves, 8 de octubre de 2009

perdio sus ojos la luz, tuvo un terrible desmayo, cayó como herido del rayo cuando lo vió muerto a Cruz (del Martín Fierro)

Ese último día de marzo
Se congelaron las hojas secas en vuelo
Los pájaros se embalsamaron en sus ramas
Y un silencio hondo, helado, tomó el mundo.
Ese último día de marzo
mi infancia murió contra una pared de hielo
Y quedaron por siempre
mis ojos con arena

Ese último día de marzo
El cielo robaba un ángel
Y mi corazón conoció la verdadera cara de la vida
Cruel, repentina, inhumana, vil
Ese último día de marzo
La gente, ignorante, sonriente, iba
Algún transeúnte cantaba su canción favorita
Sin reparar que hasta los pájaros en las ramas estaban tiesos

No cayeron rayos, no tembló el mundo
No vinieron catástrofes, no morimos nosotros el siguiente día
Ese último día de marzo se cerró por años
el calendario de mi vida.

Sin llaves y a oscuras por Fabian Casas

Era uno de esos días en que todo sale bien.
había limpiado la casa y escrito
dos o tres poemas que me gustaban.
No pedía más.

Entonces salí al pasillo para tirar la basura
y detrás mío, por una correntada,
la puerta se cerró.
Quedé sin llaves y a oscuras
sintiendo las voces de mis vecinos
a través de sus puertas.
Es transitorio, me dije;
pero así también podría ser la muerte:
un pasillo oscuro
un puerta cerrada con la llave adentro
la basura en la mano

aquelarre

Sin tener idea que de tanto sacar conclusiones sobre mi mísma, erradas por supuesto, se arman dentro de mi un montón de criaturas que brotan como yemas de un hongo venenoso.
Brota un ser pálido , puro ojo abierto atónito ,pupilas rígidas, palidez de espectro , que sólo pide que te calles para seguir sintiendo la sangre latir en su carótida.
También brota un ser verde, aguerrido y agresivo que insulta, golpea , te pega en la punta de la frente, harto de tanto análisis de décima. y gritando dice, tomatelás de una vez, dejame con mi misma, que esta bueno.
Brota un ser lánguido, casi de cuento de hadas con varita rota que intenta en vano hacer abracadabra sobre tu mente enloquecida y así volver todo a la forma exacta , carroza a calabaza, princesa a persona, mujer insatisfecha a mujer plena, todo en su lugar de nuevo.
Brota la niña de mi infancia, la que lloraba que ya no quiere llorar más en su vida, no hoy, ni mañana ni mucho menos por insatisfacciones ajenas.
Y entre tanta esquizofrenia de brotes, me quedo, casi en coma, tratanto de ahuyentarlas, para mantenerme en mis trece, como soy, imperfecta, plena en mis defectos, ésta, la misma, la que a mí me basta, te guste o no.

jueves, 1 de octubre de 2009

algunos pasos nos sirven para salir de nuestra pieza,unos pocos para salir de nuestra vida (Fabian Casas)

La vida es un caracol enorme
de infinitos giros en espiral
solo se avanza dando pasos al costado
la vida es un caracol enorme


Me salí, un día, así sin anestesia
dolió el salto, dolió la caida inmensa hacia la nada de mi misma
consciente de lo que se venía
me salí
de todos modos
sabiendo,
fui susto y fui sabia
volví a mi útero
y en un doloroso pujo
fui
viva
por primera vez.

miércoles, 30 de septiembre de 2009

conjuro para manejar el tiempo

Quiero volver el tiempo atrás, para mirarme,
y corregir errores irremediables
Amar más a los que pase de largo
Comprender más a los que ya no están.
Quiero volver el tiempo atrás para ser
con la sabiduría de hoy , mejor ayer y mejor mañana
Quiero volverlo atrás y aprovechar cada minuto perdido en nimiedades
Y valorar cada momento desperdiciado que hoy sé , era tan valioso.
Quiero volver a oler el cuello de mis hijos mamando
Y volver a sentir la colonia de mi papá en el auto hacia el colegio
Quiero volver a jugar a la rayuela en el patio.
Quiero compartir secretos adolescentes con mis amigas.
Quiero volver a zambullirme en las olas.
Quiero transformar cada palabra brusca inmerecida
en una caricia o en una sonrisa comprensiva
Quiero abrazar aunque sea por un rato a aquellos que tanto extraño y no volverán
Y con todo esto mimarme un poco , para volver el tiempo a su lugar de nuevo
Y seguir adelante.


...........El tiempo es el cuchillo perfecto que parte en dos a los hombres dejándoles una mitad en el recuerdo y otra caminando hacia adelante como quien busca el futuro........ Edwin Madrid, Quito . Ecuador.

martes, 29 de septiembre de 2009

24 hs de licencia

... hoy no pondré mi mirada al frente y adelante
quiero a mis pies y mis ojos colgados en el aire.... gabo ferro

Hoy no pondré mi mirada al frente. Al fin de cuentas tengo derecho a bajar los brazos por un día al menos. no quiero hoy, sólo por hoy, ser optimista. y eso que el optimismo es para mí una regla básica del buen vivir.
Pero hoy, en acto de rebeldía contra mi misma, me declaro en huelga de mí. y me permito todas las licencias que entonces me llegan como cataratas.
me siento como un asmático al que le conectan el oxígeno. oxígeno puro mata, pero un ratito, 24 horas de sanador oxígeno me suenan a droga que alivia.
y entonces hago cuentas de mis recién arribadas licencias. licencia para la bronca, licencia para el enojo, licencia para el basta (sólo por hoy, claro) licencia, en síntesis para tomarme todas las licencias que me dé la gana.
Porque al fin de cuentas, mañana, cuando termine la huelga de mí, volveré a ser la optimista de siempre. Y no está mal.